Visualizando el apoyo mutuo

 Los Centros de Apoyo Mutuo en Puerto Rico surgieron parcialmente como iniciativas comunitarias de rescate y recuperación en la inmediatez de la emergencia del huracán María así como una respuesta al mal manejo de distribución de ayuda por parte de agencias gubernamentales a nivel local y federal. Estas organizaciones siguen un modelo de autogestión que puede ser definido como una perspectiva de desarrollo y organización social que centra el derecho de las personas a la autodeterminación y participación en las esferas políticas y socioeconómicas. Más aún, la autogestión busca romper con unos patrones de socialización sobre el desarrollo económico y social que resultan insostenibles ya que anteponen al individuo frente al colectivo, lo indeterminado frente a la experiencia y la idea de que el desarrollo es unidireccional (Vilaseca 2012). 

Inicialmente, los CAMs se enfocaron en una variedad de tareas directamente atadas al estado de emergencia: (1) la distribución de donativos y suministros; (2) la organización de brigadas para ayudar en la limpieza de escombros; y (3) la asistencia a individuos con necesidades urgentes de vivienda y alimentación. Según el estado de emergencia dio paso a la etapa de recuperación, los CAMs expandieron sus agendas de trabajo para incluir proyectos a largo plazo que enfatizaban sus principios de autogestión bajo la rúbrica de desarrollo “desde abajo y desde adentro” y “apoyo mutuo, esfuerzo propio”.  

A tres años del paso del huracán María por Puerto Rico, la mayoría de los CAMs siguen en pie, gestando proyectos relacionados a la recuperación pos-María pero también en otros que buscan potenciar el desarrollo integral socioeconómico de sus comunidades.